El famosos dise\u00f1ador americano Ralph Lauren decidi\u00f3 crear su propia versi\u00f3n de lo que ser\u00eda un reloj cl\u00e1sico y esto fue el resultado como parte de una nueva colecci\u00f3n de relojes llamada \u00abSporting\u00bb. El dise\u00f1o est\u00e1 influenciado en dise\u00f1os muy cl\u00e1sicos en donde la sencilles pero a la vez el lujo se pueden ver por todos lados. La m\u00e1quina del\u00a0Ralph Lauren Sporting Classic est\u00e1 hecho de 31 joyas diferentes y es un movimiento autom\u00e1tico llamado RL366. El dise\u00f1o lujoso tiene una caja de 45mm hecha de acero inoxidable, y el cristal como era de esperarse est\u00e1 hecho de zafiro<\/a>.<\/p>\n

La correa est\u00e1 hecha de piel de cocodrilo y la m\u00e1quina del\u00a0Ralph Lauren Sporting Classic tiene una reserva de poder de hasta 46 horas, este nuevo reloj de Ralph Lauren ya est\u00e1 a la venta alrededor del mundo, y est\u00e1 disponible en diferentes puntos alrededor del mundo<\/a>.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

El famosos dise\u00f1ador americano Ralph Lauren decidi\u00f3 crear su propia versi\u00f3n de lo que ser\u00eda un reloj cl\u00e1sico y esto fue el resultado como parte de una nueva colecci\u00f3n de relojes llamada \u00abSporting\u00bb. El dise\u00f1o est\u00e1 influenciado en dise\u00f1os muy cl\u00e1sicos en donde la sencilles pero a la vez el lujo se pueden ver por todos lados. La m\u00e1quina del\u00a0Ralph Lauren Sporting Classic est\u00e1 hecho de 31 joyas diferentes y es un movimiento autom\u00e1tico llamado RL366. El dise\u00f1o lujoso tiene una caja de 45mm hecha de acero inoxidable, y el cristal como era de esperarse est\u00e1 hecho de zafiro. La correa est\u00e1 hecha de piel de cocodrilo y la m\u00e1quina del\u00a0Ralph Lauren Sporting Classic tiene una reserva de poder de hasta 46 horas, este nuevo reloj de Ralph Lauren ya est\u00e1 a la venta alrededor del mundo, y est\u00e1 disponible en diferentes puntos alrededor del mundo.<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":3898,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[19],"tags":[914,1020,71,917,330],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3897"}],"collection":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=3897"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3897\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/3898"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=3897"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=3897"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=3897"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}