Esta es la botella de Cognac m\u00e1s cara del mundo, es una botella de\u00a0Cuvee Leonie hecha por\u00a0Cognac Croizet y est\u00e1 a la venta<\/a> por\u00a0$157,000 USD.<\/strong>\u00a0La botella es parte de una cosecha del a\u00f1o 1858 y esta puede ser tu oportunidad de beber parte de un R\u00e9cord Guinness, ya que una botella de este mismo cognac del mismo a\u00f1o fue subastada en Shangai, China por\u00a0$156,760 USD<\/strong>\u00a0y hasta cuenta con el certificado del Record Guinness.<\/p>\n

El\u00a0Cuvee Leonie de Cognac Croizet es una entre las muy pocas botellas que la familia Croizet han preservado en su \u00abParadis\u00bb el cual es un peque\u00f1o cuarto que cuenta con\u00a0pre-phylloxera eaux-de-vie de los a\u00f1os 1858.<\/p>\n

Adem\u00e1s de la exclusividad, esta botella puede presumir de un sabor y un aroma \u00fanico que jam\u00e1s podr\u00e1n ser recreados.<\/p>\n

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Esta es la botella de Cognac m\u00e1s cara del mundo, es una botella de\u00a0Cuvee Leonie hecha por\u00a0Cognac Croizet y est\u00e1 a la venta por\u00a0$157,000 USD.\u00a0La botella es parte de una cosecha del a\u00f1o 1858 y esta puede ser tu oportunidad de beber parte de un R\u00e9cord Guinness, ya que una botella de este mismo cognac del mismo a\u00f1o fue subastada en Shangai, China por\u00a0$156,760 USD\u00a0y hasta cuenta con el certificado del Record Guinness. El\u00a0Cuvee Leonie de Cognac Croizet es una entre las muy pocas botellas que la familia Croizet han preservado en su \u00abParadis\u00bb el cual es un peque\u00f1o cuarto que cuenta con\u00a0pre-phylloxera eaux-de-vie de los a\u00f1os 1858. Adem\u00e1s de la exclusividad, esta botella puede presumir de un sabor y un aroma \u00fanico que jam\u00e1s podr\u00e1n ser recreados.<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":368,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[2605],"tags":[148,147,149,150],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/367"}],"collection":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=367"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/367\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/368"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=367"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=367"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=367"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}