Bentley la marca famosa por los coches de ultra lujo decidi\u00f3 entrar en el mundo de la decoraci\u00f3n del hogar con su nueva Bentley Home Collection, dise\u00f1ada en colaboraci\u00f3n con el grupo Luxury Living.<\/p>\n

El director de producci\u00f3n y marketing de Bentley Motors Stefan\u00a0Buescher<\/strong> dijo:<\/p>\n

Por m\u00e1s de 90 a\u00f1os Bentley ha producido los mejores interiores de coche hechos a mano de todo el mundo. Ahora nos queremos enfocar al lujo disponible en la casa y oficinas de nuestros clientes.<\/p><\/blockquote>\n

Bentley con esto trata de mantener el esp\u00edritu tradicional de la marca pero d\u00e1ndole un giro hacia el futuro. Siguiendo el ejemplo de la famosa suite de Bentley en el hotel St. Regis de Nueva York, la colecci\u00f3n ser\u00e1 caracterizada por el uso de pieles, maderas s\u00faper finas, metales, seda y vidrio.<\/p>\n

Un avance se present\u00f3 en la feria del mueble de Mil\u00e1n, y se espera que la colecci\u00f3n completa sea revelada en Enero de 2014.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

Bentley la marca famosa por los coches de ultra lujo decidi\u00f3 entrar en el mundo de la decoraci\u00f3n del hogar con su nueva Bentley Home Collection, dise\u00f1ada en colaboraci\u00f3n con el grupo Luxury Living. El director de producci\u00f3n y marketing de Bentley Motors Stefan\u00a0Buescher dijo: Por m\u00e1s de 90 a\u00f1os Bentley ha producido los mejores interiores de coche hechos a mano de todo el mundo. Ahora nos queremos enfocar al lujo disponible en la casa y oficinas de nuestros clientes. Bentley con esto trata de mantener el esp\u00edritu tradicional de la marca pero d\u00e1ndole un giro hacia el futuro. Siguiendo el ejemplo de la famosa suite de Bentley en el hotel St. Regis de Nueva York, la colecci\u00f3n ser\u00e1 caracterizada por el uso de pieles, maderas s\u00faper finas, metales, seda y vidrio. Un avance se present\u00f3 en la feria del mueble de Mil\u00e1n, y se espera que la colecci\u00f3n completa sea revelada en Enero de 2014.<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":356,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[11],"tags":[144,145],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/355"}],"collection":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=355"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/355\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/356"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=355"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=355"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=355"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}