Bamford Watch Department<\/a> nos sorprende cada vez que saca una nueva edici\u00f3n especial de sus relojes\u00a0custom<\/em> y es que el equipo detr\u00e1s de Bamford en verdad tienen un gran gusto por el dise\u00f1o y el estilo, y hasta nos podr\u00edamos atrever a decir que los relojes Rolex m\u00e1s bonitos hoy en d\u00eda, no vienen precisamente de la marca Genovesa sino de Bamford que se dedica a dise\u00f1ar re-dise\u00f1ar relojes de marcas de lujo como este Yacht-Master II<\/a>.<\/p>\n

Y esta vez con el cl\u00e1sico Submariner de Rolex nos volvieron a sorprender, ya que con este nuevo tono de negro y con cer\u00e1mica le han dado nueva vida al Submariner que ya puede llegar a parecer anticuado. Bamford tambi\u00e9n decidi\u00f3 quitarle los n\u00fameros en el\u00a0dial<\/em> del reloj lo que le da un dise\u00f1o un poco m\u00e1s elegante que a nosotros nos encant\u00f3.<\/p>\n

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Bamford Watch Department nos sorprende cada vez que saca una nueva edici\u00f3n especial de sus relojes\u00a0custom y es que el equipo detr\u00e1s de Bamford en verdad tienen un gran gusto por el dise\u00f1o y el estilo, y hasta nos podr\u00edamos atrever a decir que los relojes Rolex m\u00e1s bonitos hoy en d\u00eda, no vienen precisamente de la marca Genovesa sino de Bamford que se dedica a dise\u00f1ar re-dise\u00f1ar relojes de marcas de lujo como este Yacht-Master II. Y esta vez con el cl\u00e1sico Submariner de Rolex nos volvieron a sorprender, ya que con este nuevo tono de negro y con cer\u00e1mica le han dado nueva vida al Submariner que ya puede llegar a parecer anticuado. Bamford tambi\u00e9n decidi\u00f3 quitarle los n\u00fameros en el\u00a0dial del reloj lo que le da un dise\u00f1o un poco m\u00e1s elegante que a nosotros nos encant\u00f3.  <\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":3137,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[19],"tags":[562,688,140,560,1015],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3132"}],"collection":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=3132"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/3132\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/3137"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=3132"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=3132"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=3132"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}