Hoy en d\u00eda hay tantas cubiertas para iPhone<\/a>, iPad<\/a> y otros gadgets<\/a> que es dif\u00edcil que una realmente nos llegue a llamar la atenci\u00f3n, pero esta nueva creaci\u00f3n de la compa\u00f1\u00eda koreana\u00a0POSH-PROJECTS vaya que si lo ha hecho, y es que este nuevo producto es realmente inusual y \u00fanico dos factores que a nosotros en SNOB nos llaman mucho la atenci\u00f3n. Luna es una cubierta para iPhone 5 que est\u00e1 hecha de concreto y cada una de las cubiertas est\u00e1n inspiradas en la luna.<\/p>\n

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Cada una de las cubiertas Luna tiene un dise\u00f1o diferente, esto causado por el proceso de elaboraci\u00f3n con el concreto lo que las hace muy robustas y duraderas. Debido a que cada una de estas cubiertas tiene mucho tiempo de elaboraci\u00f3n -en parte por que cada una es \u00fanica- se encuentran en escasez incluso en la p\u00e1gina de POSH-PROJECTS, pero la marca asegura que muy pronto podr\u00e1s encontrar m\u00e1s en su p\u00e1gina<\/a>.<\/p>\n

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Hoy en d\u00eda hay tantas cubiertas para iPhone, iPad y otros gadgets que es dif\u00edcil que una realmente nos llegue a llamar la atenci\u00f3n, pero esta nueva creaci\u00f3n de la compa\u00f1\u00eda koreana\u00a0POSH-PROJECTS vaya que si lo ha hecho, y es que este nuevo producto es realmente inusual y \u00fanico dos factores que a nosotros en SNOB nos llaman mucho la atenci\u00f3n. Luna es una cubierta para iPhone 5 que est\u00e1 hecha de concreto y cada una de las cubiertas est\u00e1n inspiradas en la luna. Cada una de las cubiertas Luna tiene un dise\u00f1o diferente, esto causado por el proceso de elaboraci\u00f3n con el concreto lo que las hace muy robustas y duraderas. Debido a que cada una de estas cubiertas tiene mucho tiempo de elaboraci\u00f3n -en parte por que cada una es \u00fanica- se encuentran en escasez incluso en la p\u00e1gina de POSH-PROJECTS, pero la marca asegura que muy pronto podr\u00e1s encontrar m\u00e1s en su p\u00e1gina.<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":1392,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[13],"tags":[433,435,434,228,334],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1390"}],"collection":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=1390"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/1390\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/1392"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=1390"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=1390"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=1390"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}