{"id":10051,"date":"2015-05-19T00:38:27","date_gmt":"2015-05-19T05:38:27","guid":{"rendered":"https:\/\/snob.mx\/?p=10051"},"modified":"2019-02-23T20:38:05","modified_gmt":"2019-02-24T02:38:05","slug":"los-5-estilos-de-barba-mas-hot-del-momento","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/snob.mx\/style\/los-5-estilos-de-barba-mas-hot-del-momento.html","title":{"rendered":"Los 5 estilos de barba m\u00e1s hot del momento"},"content":{"rendered":"

Si algo le podemos agradecer a los hipsters son las barbas. S\u00ed, gracias a esta subcultura que se puso de moda hace ya algunos a\u00f1os, el vello facial lleg\u00f3 para quedarse. Los hipsters comenzaron a caminar por el mundo con su look desali\u00f1ado \u2013casi sucio\u2013 para desplazar a los metrosexuales con su look cuidado \u2013casi perfecto\u2013. Y entonces, regresaron las barbas en todas sus formas, tama\u00f1os y colores.<\/p>\n

A partir de entonces las barbas se convirtieron en un s\u00edmbolo sexual y objeto de atracci\u00f3n, a tal grado que ha surgido el t\u00e9rmino Lumbersexual<\/em><\/strong>, que se refiera a aquellos hombres con un look que nos recuerda a un le\u00f1ador o carpintero. Pero, como todo en esta vida, no a todos les queda el mismo estilo. Tanto por su f\u00edsico y estructura \u00f3sea como por la personalidad, lucir una barba poblada o una cuidada depender\u00e1 de cada quien. Es por eso que en Snob nos hemos dado a la tarea de enumerar los estilos de barbas m\u00e1s hot<\/em> del momento, para que elijas tu favorito:<\/p>\n

 <\/h3>\n

La de tres d\u00edas<\/h3>\n

Es esa peque\u00f1a sombra que se vislumbra cuando dejas de rasurarte por unos d\u00edas. Puedes mantener este look<\/em> por mucho tiempo cuidando tu barba y recort\u00e1ndola cada que sea necesario.<\/p>\n

\"barba<\/a><\/p>\n

 <\/h3>\n

La mangora o barba completa<\/h3>\n

Es aquella m\u00e1s crecida que la de \u201ctres d\u00edas\u201d pero que se mantiene perfectamente delineada sobre tu cara.<\/p>\n

\"mangora\"<\/a><\/p>\n

 <\/h3>\n

La goatee<\/h3>\n

Se refiere a una peque\u00f1a barba en el ment\u00f3n, puede ser tan abundante o corta como quieras, con bigote o sin bigote. Pero \u00a1aguas! hay que saberla definir y cuidar para que se vea bien.<\/p>\n

\"goatee\"<\/a><\/p>\n

 <\/h3>\n

La lumbersexual<\/h3>\n

Piensa en un le\u00f1ador, con una barba completa, un poco larga y abundante. Pero no crean que por dejarla crecer no requiere tanto cuidado, para mantenerla hay que recortarla y limpiarla cada que sea necesario.<\/p>\n

\"lumbersexual\"<\/a><\/p>\n

 <\/p>\n

Gray area<\/h3>\n

Para aquellos que est\u00e1n llegando a la edad de las canas, \u00a1no las escondan! Le puede dar un toque sexy y sofisticado a su look.<\/p>\n

\"gray<\/a><\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

Si algo le podemos agradecer a los hipsters son las barbas. S\u00ed, gracias a esta subcultura que se puso de moda hace ya algunos a\u00f1os, el vello facial lleg\u00f3 para quedarse. Los hipsters comenzaron a caminar por el mundo con su look desali\u00f1ado \u2013casi sucio\u2013 para desplazar a los metrosexuales con su look cuidado \u2013casi perfecto\u2013. Y entonces, regresaron las barbas en todas sus formas, tama\u00f1os y colores. A partir de entonces las barbas se convirtieron en un s\u00edmbolo sexual y objeto de atracci\u00f3n, a tal grado que ha surgido el t\u00e9rmino Lumbersexual, que se refiera a aquellos hombres con un look que nos recuerda a un le\u00f1ador o carpintero. Pero, como todo en esta vida, no a todos les queda el mismo estilo. Tanto por su f\u00edsico y estructura \u00f3sea como por la personalidad, lucir una barba poblada o una cuidada depender\u00e1 de cada quien. Es por eso que en Snob nos hemos dado a la tarea de enumerar los estilos de barbas m\u00e1s hot del momento, para que elijas tu favorito:   La de tres d\u00edas Es esa peque\u00f1a sombra que se vislumbra cuando dejas de rasurarte por unos d\u00edas. Puedes mantener este look por mucho tiempo cuidando tu barba y recort\u00e1ndola cada que sea necesario.   La mangora o […]<\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":10066,"comment_status":"open","ping_status":"open","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"footnotes":""},"categories":[23],"tags":[2389,2383,2381,1832,2567,2384,2568],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/10051"}],"collection":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=10051"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/10051\/revisions"}],"wp:featuredmedia":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media\/10066"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=10051"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=10051"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/snob.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=10051"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}